Los sufrimientos humanos, niños nacido prematuros, trágicos accidentes mortales, ataques de terrorismo y pérdida de los inocentes, niños sufriendo y muriendo debido a la malnutrición (miles cada día), personas saludables, dinámicas e inteligentes, que padecen de la enfermedad de Parkinson y Alzheimer y a veces ambas enfermedades al mismo tiempo---existe algún significado a este predicamento humano, llamado "Sufrimiento?"
El sufrimiento es neutral--es decir, que no tiene ningún valor moral, ni positivo ni negativo! Sin embargo, si uno entiende el sufrimiento a la luz de la vida de Jesús, especialmente a la luz de Su pasión, el sufrimiento y la muerte en la Cruz el Primer Viernes Santo , entonces de hecho, el sufrimiento no sólo tiene valor, sino también tiene un valor infinito!
Sin embargo, esta es la clave. Nuestro sufrimiento debe ser unido, al sufrimiento y la muerte de Jesús.
¿Cómo este dicho lo dice: "El Sufriendo o te hace mejor o te amarga!" Si, su sufrimiento está unido al sufrimiento de Jesús en la Cruz y conectado sacramentalmente el Santo Sacrificio de la Misa, entonces tu has descubierto la clave para la santidad, el secreto de los santos! En resumen, el sufrimiento santifica o nos aplasta. Si unimos nuestra Cruz, a la Cruz de Cristo y le invitamos a El, que nos ayude a llevar nuestra Cruz, entonces cada paso que caminamos con Jesús nos convertimos en más santos!
¿Cuáles son entonces, algunos frutos positivos que florecen en nuestras almas, por el sufrimiento en unión con Nuestro Señor y Salvador Jesucristo?
1. EL CRECIMIENTO EN LA ORACIÓN! El sufrimiento muchas veces nos forza a doblar nuestras rodillas por la simple razón, que profundamente reconocemos que frágiles y que débiles somos, y que poco podemos hacer por nuestros propios medios! Cómo cierto refrán: "No hay ateos en las trincheras!"
2. HUMILDAD. Una vez más, en el sufrimiento nuestras fuerzas se agotan--a menudo físicamente, emocionalmente e intelectualmente. Por lo tanto, debemos de confiar en la fuerza de Dios. "Nuestra ayuda esta en el nombre del Señor, que hizo el cielo y la tierra".
3. LA COMPASIÓN. Si tú has sufrido intensamente insoportables dolores, y alguien se te acerca con un dolor similar, entonces puedes compadecerte y tener compasión de él o de ella, habiendo pasado por una situación similar dolorosa. Por ejemplo, una mujer que haya sobrevivido y que haya sufrido a través de un "Cáncer de mama", ciertamente puede derramar lágrimas con una amiga que le revela el descubrimiento, de una "Mancha en el pecho". La compasión! Qué hermosa virtud, significa un ardor de sufrir con los demás. Fr. Bruno Lanteri afirmó, que los sufrientes pecadores deben venir al sacerdote, el cuál debería estar dispuesto a derramar, compartir y unir las lagrimas juntos! Arzobispo Fulton Sheen define al sacerdote como "La víctima quien ofrece a la víctima!"
4. LA PACIENCIA. El sufrimiento es duro, consumidor, agotador, pero si es aceptado voluntariamente y unido a Jesús, entonces es bello—también es, una virtud necesaria--la paciencia se adquiere. Que importante! Jesús dijo que por su paciencia ustedes salvarán sus almas!
5. SALVAR ALMAS! Nuestra Señora de Fátima y Nuestra Señora de Lourdes exhortaron al mundo a rezar, pero también a ofrecer sacrificios. El sufrimiento y sacrificio son sinónimos! Sufriendo con motivos sobrenaturales por amor de Dios y por la salvación de las almas, nosotros realmente podemos colaborar con el Señor, para salvar almas inmortales por toda la eternidad.
6. EL AMOR. Una vez Jesús dijo a Santa Faustina Kowalska, la mejor manera de medir el amor, es la medida que uno está dispuesto a sufrir por la persona amada. El mejor ejemplo! Viernes Santo y todo lo que Jesús sufrió por usted y por mí! La rima de San Francisco de Sales, "La medida de amar a Dios es, amar a Dios sin medida".
7. DESPRENDIMIENTO. Todos tendemos a aferrarnos a personas, lugares, cosas e incluso a nuestras propias opiniones (¡a menudo bastante superficiales!). Confrontado con nuestra mortalidad, una experiencia cercana a la muerte o una operación peligrosa que se avecina en un futuro cercano, nuestros apegos desordenados, aferrados a nuestros pequeños "juguetes", pueden manifestarse como ridículos. "Vanidad de vanidades", todo es vanidad, si no lo relacionamos a nuestro destino final: el Honor y la gloria de Dios y nuestra salvación eterna! ¿Por qué aferrarnos a polvo y cenizas? Entre mas nosotros nos vaciemos nuestros corazones de nosotros mismos, mas espacio para el Señor, Sus valores y Su Reino!
8. PURIFICA. Como el oro es purificado por el fuego, también el alma del seguidor del Señor Crucificado, por el crisol del sufrimiento. ¡Deudores en realidad somos todos! Todos tenemos nuestra cuota de los pecados. Mejor pagar ahora que pagar más tarde. El sufrimiento voluntariamente aceptado, puede utilizarse para acortar nuestro Purgatorio, después de muertos; Quién sabe, tal vez eliminarlo totalmente, si el resultado del sufrimiento en perfecto amor!

9. ¡ALMA VÍCTIMA Y SUFRIMIENTO! Entre los individuos más admirables que hayan caminado la faz de la tierra, son muy pocos, pero grandemente nobles y profundamente caritativos; estas son las "Almas Víctimas". Padre Pio, S. Teresa de Lisieux, Beata Jacinta Marto---solo por mencionar unos pocos, ardiendo con un amor consumidor por Dios, un deseo de reparar por pecados y un hambre por la salvación de las almas. Por esa razón, la pequeña Jacinta se privaría de alimentos, agua, comodidad, honor, suculentas uvas (sus favoritas) e incluso, la danza! ¿Por qué? Este sufrimiento consolaría el Corazón de Jesús, pero el resultado seria, la conversión de los pecadores y la salvación de las almas! No te olvides! Jacinta era sola un niña pequeña! La santidad es para todos; trasciende la cultura, la vida pasada, tiempo y circunstancias! En cada amanecer Dios da un nuevo futuro brillante!
10. CONSUELA LOS CORAZONES DE JESÚS Y MARÍA. En Fátima, una de las últimas visiones, fue la del Doloroso e Inmaculado Corazón de María. El corazón de María estaba rodeado, en círculo y penetrado por afiladas espinas. Nosotros nos hemos punzado por las espinas de nuestro jardín: ay! ¿Te imaginas tu corazón atravesado por una espina!!! Unamos nuestros sufrimientos al Sagrado corazón de Jesús y al Inmaculado Corazón de María; y por vida santas extirpemos esas espinas punzantes y coronemos a Jesús y María, como Rey y Reina de nuestros corazones!

En conclusión, el sufrimiento tiene significado sólo en la medida en que este unido a la Cruz, la Pasión, la muerte de Nuestro Señor y Salvador Jesucristo. O el sufrimiento nos hace mejores o amargos! Unir tu sufrimiento físico, emocional, social, profesional y moral a Jesús! Colócalos en el altar, sobre la patena, y el sufrimiento de Jesús y los suyos serán unidos y producen una infinita efusión de gracia. Doloroso e Inmaculado Corazón de María, ruega por nosotros!