¡La Hora de Poder! Frutos de la Hora Santa Diaria

¡Son incontables los beneficios de hacer una Hora Santa diaria, hecha con orden y metódicamente!  La corona de gloria el espera a quien se dedique seriamente a su Hora Santa.  Es necesario ser fiel, tener un propósito firme y una determinada determinación, aun en los días difíciles y perseverar hasta el final.  


Un ejemplo radiante para todo el mundo
El Venerable Arzobispo Fulton J. Sheen


Fulton Sheen - hombre de Dios, predicador, escritor, primer tele-radio predicador cristiano Católico, misionero y arzobispo - nunca atribuyó su éxito a sí mismo, sino a Jesús, con quien se encontraba diariamente en el Santísimo Sacramento al hacer su Hora Santa!   Fulton Sheen quien popularizó la expresión  de la "Hora Santa" - The HOUR OF POWER.

En una ocasión, Fulton Sheen dio un presentación a un grupo de sacerdotes y obispos.  Y les dijo de forma muy directa, que a ellos cuando predicaban la gente no les escuchaban o ponían atención, pero que a él – el Arzobispo Fulton J. Sheen – sí le ponían atención y le escuchaban.  Y esto se debía por al poder que él recibía diariamente en su Hora Santa – "La hora de Poder".


Sheen dijo, que en sus cincuenta años de sacerdocio, ¡nunca había faltado una sola Hora Santa!  ¡Ni una sola vez, en toda su vida como sacerdote y obispo!


Fulton Sheen era un escritor prolífico , viajaba por el mundo entero, tenía programado conferencias todo el día, tenía su programa de radio y televisión, dirigía la Oficina Misionera de la Iglesia Católica, llegó a ser instrumento de la conversión de un gran número de almas  -- este gran hombre de Dios, con todos compromisos, todos los días apartaba tiempo para estar con Jesús en su Hora Santa. Esta fue la clave de su éxito apostólico.  Su éxito se debía su unión con Jesús, su profunda y creciente amistad con Jesús en su Hora Santa diaria – "¡La Hora de Poder"!


Hoy se le conoce como Venerable Arzobispo Fulton Sheen.  ¡Así es!  ¡Se ha abierto al causa para su beatificación y canonización!  ¡Alabado sea Dios por tan maravilloso ejemplo!


Después de esta semblanza biográfica de uno de los más grandes héroes de América – y héroe de Dios – se enumerarán los abundantes frutos que emanan de ser fieles diariamente a la Hora Santa, ¡tu propia Hora de Poder!!!




1. AMISTAD CON CRISTO.   El Papa Benedicto XVI constantemente nos desafía, especialmente en este "Año de la fe", a que nos esforcemos por cultivar una amistad creciente y profunda con Jesús.  Jesús en la Última Cena llamó a sus apóstoles "Amigos", e igual Jesús te llama a ti a una profunda amistad con él.  Todos buscamos amistad y unión con los demás - ¡eso es comunión!  Claro, Jesús es el mejor de los amigos; ¡Él es el amigo fiel que nunca falla!  Sin embargo, una verdadera amistad se cultiva, con visitas a ese amigo, conociendo más a ese amigo, conversando con ese amigo, compartiendo las alegrías y las tristezas, los éxitos y fracasos, en una palabra, los secretos más profundos.  Pero aun en las amistades más estrechas, a veces quedan cosas sin entender o decir.  Pero a Jesús, siempre le podemos expresar nuestros más íntimos pensamientos, nuestros miedos, nuestras angustias y dolores porque él nos entiende y conoce hasta el detalle más pequeño de nuestra existencia!


2. LA PALABRA DE DIOS.   La sustancia y el sustento básico de nuestra meditación debe ser la Palabra de Dios.  Jesús le dijo al enemigo, al diablo que lo tentó, que el hombre no vive sólo del pan, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.  El salmista dice que la Palabra de Dios es una lámpara para nuestros pasos y una luz para nuestro camino.  San Jerónimo nos recuerda, "Ignorancia de la Sagrada Escritura es ignorancia de Cristo". (Dei Verbum, del los documentos del Vaticano II)  En nuestra Hora Santa, podemos leer, meditar, escuchar la Palabra de Dios y dejar que el Señor hable y mueva nuestro corazón.   Estos son unas sencillas sugerencias para la meditación bíblica.


3. DISCIPLINA.  ¡Note el cambio en su vida!  Una vez que forme la decisión y disciplina de ser fiel a su Hora Santa, también tendrá una mayor disciplina en las otras actividades en el transcurso de su denso programa de ocupaciones.  ¡Un acto diario de disciplina, el hacer su Hora Santa, le motivará en general, a tener una vida ordenada y disciplinada! 


4.  PAZ Y ARMONÍA.  Con la disciplina llega la paz. ¿Qué es la paz?  San Agustín la define como la tranquilidad del orden.  San Ignacio igual lo afirma dándonos el propósito de los Ejercicios Espirituales que es; ordenar lo desordenado.  En el cerro del Tepeyac, en México, nuestra Señora de Guadalupe puso en orden las rosas en la Tilma de san Juan Diego.




 5.  EL TRABAJO... lograrás más y lo harás mejor. Muchos se quejan por la falta de tiempo para llevar a cabo los distintos deberes cotidianos.  Esto se debe a la falta de orden.  La Hora Santa nos ayuda a llevar a cabo mejor nuestras obligaciones cotidianas y de ser fieles a nuestro estado de vida, de llevarlo acabo con mayor animo y voluntad y con mayor paz y alegría. ¿Por qué?  ¡La razón es muy sencilla!  Cuando hacemos nuestra Hora Santa diariamente, estamos invitando a que Dios/Jesús sea parte de todo lo que somos, todo lo que hacemos y de toda nuestra vida.  Él es el compañero oculto en el caminar de la vida hacia la eternidad – ¡igual que con los discípulos en el camino a Emaús!  Él es el que hace la mayor parte, él nos dijo: "Vengan a mí todos los que estéis cansados que yo os daré descanso.  Tomad sobre vosotros mi yugo y aprended de mí; hallaréis descanso para vuestras almas; porque yo soy manso y humilde de corazón; porque mi yugo es suave y mi carga es ligera.'' (Mt 11: 28-30).  Lo mejor es, hacer la Hora Santa lo más temprano posible y de esta forma Jesús le acompaña durante el transcurso del día y ¡él hará su carga ligera!


6.  CONVERSIÓN Y SANTIFICACIÓN DE LA FAMILIA.  Muchos tenemos familiares que han abandonado la fe, que se han alejado de la Iglesia, que están enojados, que están llenos de resentimientos y hasta hostil hacia todo lo que tiene que ver con Dios.  Tal vez hemos hablado con ellos, hemos trató de convencerlos con los mejores argumentos, pero es simplemente un ejercicio inútil.  Lo que falta es la oración.  Jesús dijo que algunos demonios sólo pueden ser expulsados con la oración y el ayuno.  Diariamente ofrezca su Hora Santa  – "La hora de Poder" – por la conversión y salvación de su ser querido, y esto  resultará sumamente fructífero.  Recuerde las incontables horas de oración y lágrimas de santa Mónica y la conversión de su hijo, san Agustín.  ¡Necesitamos a más Mónicas con sus Horas Santa diarias!




7. COMULGAR CON MAYOR FERVOR.  La Hora Santa (Hora de Poder) no sólo sirve para motivar a hijos pródigos, ovejas descarriadas, y a almas que vagan que regresen al Buen Pastor, sino que este encuentro personal con el Señor también nos ayudará a que mejore nuestra recepción de Jesús en la Sagrada Comunión.  Lo más grande que podemos hacer en esta  vida es recibir a Jesús en la Sagrada Comunión.  Sin embargo, entre mejor sea nuestra preparación, mayor será el fruto de la Comunión en nuestra alma!  Que nuestras Horas Santas nos transformen en Aquel quien recibimos en la Sagrada Comunión, recordando las palabras del Apóstol san Pablo: "Ya no vivo yo, sino es Cristo quien vive en mí."



8. CONSUELO.   En medio de las tormentas, tempestades y terremotos de la vida, siempre podemos encontrar consolación, paz, refugio, consuelo y un oasis cuando hacemos diariamente nuestra Hora Santa.  Hay días en que la batalla es feroz, el tirón de las pasiones - insistente, los ataques del diablo - implacables, la seducción del mundo y sus falsos valores - seductores.  En medio de las tormentas exteriores e interiores de la vida, qué consuelo tan grande es saber que Jesús siempre me espera y puedo encontrar mi refugio en su Sagrado Corazón y en el Corazón Inmaculado de María.  "¡Sagrado Corazón de Jesús, en Vos confío!" y, "Dulce Corazón de María, se mi salvación."

 9. EL BUEN EJEMPLO.    Hay muchas formas de predicar la Palabra de Dios.  Las últimas palabras de Jesús fueron, que salgamos a todo el mundo y contáramos las buenas noticias.(Mt 28)  Sin embargo, ¡la palabra que predicamos debe ser respaldada por el ejemplo de nuestra vida!  La persona que hace su Hora Santa diariamente – la Hora del Poder – ¡irradia bondad e inspira a otros a seguir el mismo camino!  ¿Cuántos sacerdotes – incluso el P. Broom, quien escribe este artículo – han sido inspirados de hacer una Hora Santa diario debido a la predicación de Fulton Sheen, y sobre todo por su ejemplo de vivir diariamente la Hora Santa.  Al final de su vida, el arzobispo Fulton Sheen decidió predicar retiros a sacerdotes y obispos con un objetivo: Convencer a los sacerdotes y obispos a que hagan la firme determinación y compromiso de hacer diariamente la Hora Santa.  Porque si lo hacían con determinación, ¡transformarían vidas, parroquias, diócesis y el mundo en entero! 


10.  EL CIELO.   Es de suma importancia alcanzar el cielo.   La finalidad y el fruto más sublime de la fidelidad a la Hora Santa diaria es unión con el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo, María y los ángeles y santos por toda la eternidad.  San Alfonso sin reservas lo dijo: "Quien ora bien, se salvará; quien no ora, se condenará".(CIC sobre la oración)  San Agustín expresa este mismo concepto de forma poética: "Quien ora bien, vive bien; quien vive bien, muere bien, y quien muere bien, ¡todo está bien!''


Amigos, en resumidas cuentas, comprometámos y con una determinada determinación, seamos fieles diariamente a nuestra Hora Santa  – ¡la Hora del Poder!  Si de hecho son fieles a su Hora Santa, crecerán en amistad con Jesús, crecerán en santidad y paz en el alma, trabajarán bien y con orden y disciplina, serán una fuente de santificación y de conversión a otros, recibirán a Jesús con mayor pureza de corazón en la Santa Comunión y más importante, un día serán una joya en la corona de María, en donde contemplarán la belleza del rostro de Jesús por toda la eternidad. Amén.